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Fuente: higieneambiental.com
Temática: Productos biocidas no autorizados, Salud pública, Medio ambiente.
Evita utilizar productos biocidas no autorizados. A pesar de la extensa y rigurosa normativa europea en torno a los biocidas, lamentablemente, el nivel general de incumplimiento sigue siendo alarmantemente alto. En el mercado, es posible encontrar biocidas no autorizados que representan un grave peligro para la salud humana y el medio ambiente.
Muchísimo cuidado con los biocidas que no han sido autorizados
En la Unión Europea (UE), la comercialización y el uso de biocidas están estrictamente regulados por el Reglamento (UE) Nº 528/2012. Este reglamento tiene como objetivo principal mejorar el funcionamiento del mercado de biocidas en la UE, garantizando un alto nivel de protección tanto para las personas como para el medio ambiente.
Sin embargo, recientemente, la Agencia Europea para Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA) publicó el informe BEF-2 sobre el grado de cumplimiento del Reglamento 528/2012 (BPR) durante el año 2022. Lamentablemente, los resultados no son alentadores y revelan un alto nivel general de incumplimiento del BPR en aspectos como etiquetado, publicidad, envasado y uso de sustancias activas biocidas no autorizadas.
Para que un producto biocida pueda ser comercializado y utilizado en la UE, debe someterse a un riguroso proceso de evaluación y autorización. Primero, se lleva a cabo la evaluación de la sustancia activa contenida en el producto. Una vez aprobada la sustancia, los fabricantes deben solicitar la autorización del producto biocida, demostrando su eficacia contra organismos específicos y su falta de efectos inaceptables en la salud humana y el medio ambiente.
Sin embargo, existen vías a través de las cuales los biocidas no autorizados pueden llegar al mercado, como la venta en línea, la importación ilegal y la distribución en mercados informales que no cumplen con las regulaciones de la UE.
Datos de estudio sobre intoxicaciones debidas a insecticidas
Un estudio reciente realizado por la Agencia Francesa de Seguridad y Salud Alimentaria, Medioambiental y Laboral (ANSES) revela la gravedad de este problema. El estudio se centró en los casos de intoxicación ocurridos entre 2018 y 2023 relacionados con el uso del insecticida SNIPER 1000 EC DDVP, que contiene diclorvós, una sustancia activa prohibida en Francia.
Durante este período, se registraron 170 situaciones en las que una o más personas estuvieron expuestas a este producto, con un total de 206 personas intoxicadas en diversos grados. Es alarmante que se trata de un producto biocida no autorizado en Francia.
El insecticida SNIPER 1000 EC DDVP contiene diclorvós, una sustancia perteneciente a la familia de los organofosforados. El uso de esta sustancia como producto fitosanitario fue prohibido en Francia en 2007, y en 2013 se prohibió también su uso en productos insecticidas de uso doméstico debido a su toxicidad. A pesar de estas prohibiciones, aún es posible adquirir productos que contienen diclorvós a través de canales ilegales. La ANSES informa que las personas afectadas por este insecticida adquirieron el producto en mercados, tiendas o bazares, o incluso lo importaron del extranjero, principalmente de África.
La mayoría de las intoxicaciones ocurrieron al aplicar el producto en el hogar para controlar plagas de cucarachas o chinches de la cama. Las víctimas incluyeron adultos expuestos durante la aplicación o al regresar a las áreas tratadas, niños pequeños debido a la falta de percepción del riesgo, e incluso casos de intentos de suicidio.
Muy importante. Más de lo que pensamos. Un problema de salud pública
Según la ANSES, el aumento de las infestaciones y la dificultad para erradicar las plagas, como las chinches de la cama en París, han llevado a algunas personas a recurrir a productos prohibidos que consideran más efectivos. Estos productos son fácilmente accesibles en Internet, tiendas y, a veces, se obtienen en países fuera de la UE. Esto plantea un serio problema de salud pública.
Por todo esto, es fundamental que los consumidores y las empresas estén informados y sean cautelosos al comprar biocidas, asegurándose de que los productos estén debidamente autorizados y cumplan con la legislación de la UE.
Llevar a cabo la identificación del biocida y del proveedor
Para saber qué producto estamos utilizando, debemos consultar las etiquetas de los productos biocidas, donde encontraremos información clave. Esto incluye el nombre y número de identificación del producto, generalmente los números CAS, EC o ambos, que garantizan la identificación inequívoca de la sustancia. Además, en los productos biocidas, debe constar el número de registro con el que están inscritos en el Registro de Biocidas.
Es esencial recordar que, en muchas situaciones, las plagas solo pueden ser tratadas de forma segura y efectiva por profesionales especializados. Si has utilizado productos de uso doméstico y el problema persiste o empeora, es urgente poner el problema en manos de profesionales. La seguridad y la salud deben ser siempre prioritarias cuando se trata de plagas en el hogar.
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