Las plagas de aves urbanas y de otro tipo de animales como ratas o cucarachas cada vez son más frecuentes en las grandes ciudades, y al igual que crece todo por la globalización, se incrementan también estas faunas. Las poblaciones, por lo tanto, se están convirtiendo en pequeñas y peligrosas selvas, y para evitar problemas de salud las campañas de prevención son periódicas.
Albacete no escapa de esa problemática. Tanto los Ayuntamientos como la Excm. Diputación Provincial de Albacete están desarrollando programas específicos para poner coto a estas plagas. Y también los ciudadanos, a título particular, se ven en la obligación de tomar medidas y echar mano de empresas especializadas.
Para evitar las plagas lo principal es «realizar un control, un seguimiento, y revisiones periódicas de los lugares que se vigilan». Se establecen un sistema de vigilancia de todos los lugares que se visitan. «La empresa contratada debe realizar inspecciones periódicas todos los meses a los distintos municipios, hay un sistema de vigilancia en cada edificio o en el alcantarillado, y durante esas visitas se revisa para que todo esté correcto». Asi se detecta un posible problema antes de que se convierta en plaga y evitamos con ello su propagación.
La Diputación tiene un programa de control de plagas para toda la provincia, a excepción del municipio de Tobarra, financiado a partes iguales entre la administración municipal y provincial. En estos servicios se incluye la desratización, la desinsectación y la desinfección.
En invierno, las plagas se reducen, pero cuando llega la primavera y las temperaturas suben la situación se dispara. En cambio en los días de frío el problema puede llegar a las viviendas, las cucarachas o roedores buscan los focos de calor, y en esos días las calefacciones están a pleno funcionamiento.
Y es que las plagas más comunes por estas tierras son de ratas, ratones, pulgas, garrapatas, termitas, cucarachas, palomas, y unos habitantes poco deseables, las chinches, unos animales que estaban prácticamente extinguidos desde los años 60, pero junto con el crecimiento de las ciudades han vuelto.
Otro gran problema son los roedores como ratones y ratas, y las cucarachas americanas que han desplazado a las autóctonas dada su voracidad y amplia expansión.
En Albacete por lo general y como indican los expertos, las plagas están bastante controladas. De todos modos siempre es bueno seguir una serie de consejos como por ejemplo, revisar embalajes, cajas y compras que vengan del exterior de la vivienda, comprobar cuando se compre algún artículo, que este no venga con agujeros o alguna rotura. También es indispensable no dejar restos de comida, ni basuras, ya que son la principal atracción de estas indeseables especies. Y se debe observar si hay restos de excrementos, en el caso de los roedores y aves, o algún insecto fallecido como mosquitos, moscas, hormigas o cucaracha que sirven como señal para detectar plagas.