Las personas que contraen gastroenteritis al ingerir agua o alimentos contaminados por las bacterias Escherischia coli O157:H7 y Campylobacter tienen un mayor riesgo de desarrollar hipertensión, problemas renales y enfermedades cardiovasculares a largo plazo.
Posibles secuelas de la gastroentritis aguda
Se estima que las infecciones por ingesta de alimentos o agua contaminada con la bacteria E.coli alcanzan la cifra de 120.000 casos anuales sólo en los EEU, provocando alrededor de 2.000 hospitalizaciones y 60 muertes. Sin embargo, las posibles secuelas derivadas de estas infecciones a largo plazo son en gran parte desconocidas.
Un estudio, realizado por investigadores canadienses y publicado en el British Medical Journal, evalúa el riesgo de desarrollar problemas de salud a largo plazo tras contraer gastroenteritis a través de la ingesta de agua contaminada con Escherichia coli O157:H7 y Campylobacter.
Se estudió una cohorte de 1.977 adultos, reclutados entre 2002 y 2005 en una población de Ontario, Canada, después de un brote de gastroenteritis en mayo de 2000 debido a la contaminación del sistema municipal de agua de la localidad con estas bacterias, evaluando la incidencia de hipertensión, insuficiencia renal y enfermedades cardiovasculares en los ocho años postreriores a la gastroenteritis.
Escherichia coli O157:H7, J.Janey Carr-CDC
En el momento del brote padecieron gastroenteritis aguda 1.067 participantes (54%), de los cuales 378 recibieron atención médica.
Los participantes del estudio fueron encuestados anualmente y se sometieron a un exámen físico y evaluación de laboratorio para realizar el seguimiento de su salud a largo plazo.
En comparación con los participantes que no estuvieron enfermos o sólo levemente enfermos durante el brote, los participantes que presentaron gastroenteritis aguda presentaron 1,3 veces más probabilidades de desarrollar hipertensión, fueron 3,4 veces más propensos a desarrollar insuficiencia renal, y tuvieron 2,1 veces más probabilidades de sufrir un problema cardiovascular, como un ataque al corazón o un derrame cerebral.
Los autores subrayan la importancia de garantizar alimentos y un suministro de agua libres de patógenos como factor clave en la salud pública, asi como la necesidad de realizar un seguimiento de los casos individuales de infección por E.coli, para prevenir o reducir lesiones vasculares progresivas.
Fuentes:
Long term risk for hypertension, renal impairment, and cardiovascular disease after gastroenteritis from drinking water contaminated with Escherichia coli O157:H7: a prospective cohort study, BMJ 2010; 341:c6020,